El Diseño es una de las disciplinas creativas presente en la Innovación Social. La complejidad de los desafíos sociales destaca, no solo en la necesidad de este cambio social, sino también por modificar la manera en la que se desarrolla esta innovación. Dos perspectivas teóricas orientan la investigación sobre el proceso de la Innovación Social. La primera está centrada en el agente, bajo esta perspectiva la Innovación Social es estudiada por las acciones de los individuos y la colectividad, y ésta es difundida por los estudios de Diseño. La segunda es estructuralista, comprende que la Innovación Social está determinada por el concepto estructural externo, y es estudiada por las teorías organizativas. A partir de las dos perspectivas se propone una tercera alternativa, denominada: estructuración, y se enfoca en el estudio de la creación e institucionalización de las prácticas. A partir del surgimiento de la Estrategia Europa 2020, crece el número de instrumentos políticos en Portugal que propician el desarrollo y la institucionalización de la Innovación Social. En esta coyuntura es relevante ampliar los estudios de Diseño e incorporar en las investigaciones el contexto político que favorece la Innovación Social. Para lograrlo, se realizó un estudio que explora las prácticas de Diseño a partir de tres proyectos portugueses con distintos fines — para la investigación, para los emprendedores y para la educación. Las lecciones aprendidas resumen la capacidad del Diseño en generar resultados significativos, a la dificultad de medir el impacto del Diseño, y a la necesidad de preparar mejor a los diseñadores para que actúen en el área de la Innovación Social. Al final de este estudio es posible apuntar las buenas prácticas aprendidas a partir de una estructura política que favorece el florecimiento de la Innovación Social y la experiencia de los diseñadores portugueses.info:eu-repo/semantics/publishedVersio
