Las alteraciones del clima provocan variaciones en la emergencia y reemergencia de vectores y las enfermedades vectoriales asociadas a ellos. Las condiciones del medio facilitan o impiden su establecimiento en distintos hábitats posibilitando o dificultando la aparición de las enfermedades. Los datos conocidos en nuestro país muestran la posibilidad real de la aparición de enfermedades ya que se viene observando un incremento de generaciones anuales, en muchas especies vectoras, tanto por la reducción del tiempo de desarrollo larvario como por la extensión temporal del período óptimo estacional fruto del ascenso de las temperaturas. El estudio de la bioecología y de la dinámica poblacional de los principales vectores, los mosquitos Culícidos, se postula de vital importancia para poder predecir escenarios locales