Servicio de Publicaciones de la Universidad de Navarra
Abstract
La aplicación del método científico a la tarea educativa ha tenido
ventajas e inconvenientes. De una parte, ha permitido
desarrollar ampliamente las técnicas educativas; de otra parte,
entender la educación como una ciencia al modo moderno ha
olvidado su finalidad más importante: el cultivo perfeccionador
de la naturaleza humana. Se precisa recuperar este fin en la tarea
educativa y se proponen para ello dos medidas. La primera,
recuperar el método socrático para alcanzar lo verdadero, lo
bueno y lo bello. La segunda, que el profesor desempeñe su
tarea desde el desarrollo de su propia humanidad, es decir, desde
las virtudes