Servicio de Publicaciones de la Universidad de Navarra
Abstract
Pocos procesos insurgentes de la época
se han identificado tan plenamente como el mexicano
con la imagen mítica del cura revolucionario.
Investigar las bases de esta metáfora es el cometido
de este ensayo. Preguntarse acerca del verdadero
alcance de la participación de los eclesiásticos, las
peculiaridades de su liderazgo, los motivos y los argumentos
de los que se sirvieron para justificar sus
acciones. Sin ninguna pretensión comparativa, es
sin embargo consciente de un horizonte hispánico,
de una cultura católica común, de sociedades en las
que los curas eran mediadores por naturaleza, contexto
a partir del cual es posible realzar con mayor
certeza las singularidades del caso novohispano