Las anomalías de la diferenciación sexual (ADS) engloban un amplio espectro de
discordancias entre los criterios cromosómico, gonadal y fenotípico (genital) que definen la diferenciación sexual; actualmente, se aboga por la denominación de «desarrollo sexual diferente»
(DSD). Su origen es congénito; se clasifican en función de los cromosomas sexuales presentes en
el cariotipo; las causas genéticas conocidas son muy diversas y heterogéneas, aunque algunos
casos pueden ser secundarios a factores maternos o medioambientales. Su diagnóstico y tratamiento requieren siempre una atención médica y psicosocial multidisciplinar. El diagnóstico
etiológico precisa la interacción entre las exploraciones clínicas, bioquímicas (hormonales), genéticas, de imagen y, eventualmente, quirúrgicas. El tratamiento debe abordar la asignación
de género, la posible necesidad de tratamiento hormonal substitutivo (suprarrenal si hay insuficiencia suprarrenal y con esteroides sexuales si hay insuficiencia gonadal a partir de la edad
puberal), la necesidad de intervenciones quirúrgicas sobre las estructuras genitales (actualmente se tiende a diferirlas) y/o sobre las gónadas (en función de los riesgos de malignización),
la necesidad de apoyo psicosocial y, finalmente, una adecuada programación de la transición
a la atención médica en las especialidades de adultos. Las asociaciones de personas afectadas
tienen un papel fundamental en el apoyo a familias y la interacción con los medios profesionales y sociales. La utilización de Registros y la colaboración entre profesionales en Grupos de
Trabajo de sociedades médicas nacionales e internacionales es fundamental para avanzar en
mejorar los medios diagnósticos y terapéuticos que precisan los DSD.Disorders of Sex Development (DSD) include a wide range of anomalies among the
chromosomal, gonadal, and phenotypic (genital) characteristics that define sexual differentiation. At present, a definition as Different Sexual Development (DSD) is currently preferred.
They originate in the pre-natal stage, are classified according to the sex chromosomes present in
the karyotype. The known genetic causes are numerous and heterogeneous, although, in some
cases, they may be secondary to maternal factors and/or exposure to endocrine-disrupting chemicals (EDCs). The diagnosis and treatment of DSD always requires multidisciplinary medical and
psychosocial care. An aetiological diagnosis needs the interaction of clinical, biochemical (hormonal), genetic, imaging and, sometimes, surgical examinations. The treatment should deal
with sex assignment, the possible need for hormone replacement therapy (adrenal if adrenal
function is impaired, and with sex steroids from pubertal age if gonadal function is impaired),
as well as the need for surgery on genital structures (currently deferred when possible) and/or
on gonads (depending on the risk of malignancy), the need of psychosocial support and, finally,
an adequate organisation of the transition to adult medical specialties. Patient Support Groups
have a fundamental role in the support of families, as well as the interaction with professional
and social media. The use of Registries and the collaboration between professionals in Working
Groups of national and international medical societies are crucial for improving the diagnostic
and therapeutic tools required for the care of patients with DSD