Article editorialEl concepto de procreación consciente y responsable fue acuñado por el neomaltusianismo como reflexión demográfica sobre las consecuencias de la reproducción humana considerada como un hecho natural y vinculado, exclusivamente, al ciclo de la vida. Se trataba de un planteamiento surgido ante un contexto de recursos escasos, como consecuencia del crecimiento, sin control, de la población. Unos años más tarde surgieron, con fuerza, los movimientos feministas y la idea de la emancipación de la mujer, reivindicando su capacidad de decisión frente al matrimonio y la maternidad y planteando el derecho de las mujeres a una maternidad consciente y elegida. En estos momentos, en el contexto occidental, tener un hijo/a se transforma en un acto consciente y madurado de elección y realización personal, perdiéndose esta idea de «maternidad natural», para conceptualizarse en el entramado social con implicaciones éticas y políticas. La maternidad y paternidad conscientes se convierte también en maternidad y paternidad responsables