Introduction. Avascular necrosis (AVN) of the capitate bone is a rare disease of unknown etiology that usually appears in young people and causes chronic pain and functional impotence in the wrist. There are multiple treatments for this pathology; however, there is currently no clear consensus on the indications for these techniques.
Presentation of the case. A 27-year-old woman who attended the Orthopedic Surgery and Traumatology Service of a tertiary care institution for pain in the left wrist that she began eight months ago. As the only antecedent of importance, she had presented a blow in the area. No alterations were found in the X-ray presented by the patient. Nuclear magnetic resonance (NMR) was ordered, which showed an extensive trabecular fracture of the capitate with signs of pseudoarthrosis and bone edema, for which conservative management was initiated. In the follow-up MRI, performed one year later, persistence of bone edema was observed, so AVN of the capitate was suspected and a computerized axial tomography was performed, which confirmed the diagnosis. The patient was treated by arthroscopic resection of the proximal pole of the capitate with good short-term results.
Conclusion. It is necessary to carry out new studies with long-term results that compare the different therapeutic options to clarify the best treatment for this rare disease.Introducción. La necrosis avascular (NAV) del hueso grande es una enfermedad rara y de etiología desconocida que suele aparecer en personas jóvenes y causa dolor crónico e impotencia funcional en la muñeca. Existen múltiples tratamientos para esta patología; sin embargo, actualmente no hay un consenso claro sobre las indicaciones de estas técnicas.
Presentación del caso. Mujer de 27 años quien asistió al Servicio de Cirugía Ortopédica y Traumatología de una institución de tercer nivel de atención por dolor en la muñeca izquierda que comenzó ocho meses atrás. Como único antecedente de importancia, había presentado un golpe en el área. En la radiografía que presentó la paciente no se encontraron alteraciones. Se ordenó resonancia magnética nuclear (RMN) que mostró fractura trabecular extensa del hueso grande con signos de pseudoartrosis y edema óseo, por lo que se inició manejo conservador. En la RMN de control, realizada un año después, se observó persistencia de edema óseo, por lo que se sospechó NAV del hueso grande y se realizó tomografía axial computarizada que confirmó el diagnóstico. La paciente fue tratada mediante resección artroscópica del polo proximal del hueso grande con buenos resultados a corto plazo.
Conclusión. Es necesario realizar nuevos estudios con resultados a largo plazo y que comparen las diferentes opciones terapéuticas para esclarecer el mejor tratamiento de esta rara enfermedad
