En primer lugar se exponen unas generalidades sobre el concepto actual de epilepsia, analizándose después, de forma panorámica, la problemática psicológica y socio-laboral de los epilépticos. La tercera parte de éstos presenta alteraciones psicológicas diversas, y sólo la mitad alcanza el mercado laboral competitivo. El estigma social que conlleva la epilepsia, limita, junto a los déficits individuales, la inserción social de estas personas. Se analiza el origen de la animadversión social hacia los epilépticos, que tiene una raíz psicosociológica, estudiándose los grupos sociales que contribuyen a su mantenimiento. Se concluye afirmando que es necesario un esfuerzo de los profesionales de la salud para propiciar la plena incorporación de estos sujetos en la sociedad