El presente estudio describe la manera como determinadas características socio-demográficas de la población (sexo, edad, actividad laboral. clase social, etc.) condicionan la ingesta de alcohol. Para ello se utilizan datos de un estudio epidemiológico comunitario de tipo transversal que, sobre una población muestral de 1.818 personas comprendidas entre 16 y 65 años -y representativa de la población de Cantabria-investiga las respuestas de la población ante el consumo de alcohol. Se encontró, entre otros datos que: 1) los modelos generales de consumo de alcohol están saturados por las características culturales generales de la población; 2) la edad y el sexo condicionan siempre la ingesta de alcohol, ejerciendo las otras variables un efecto menos significativo; 3) el modo rural de vida se asocia a mayores niveles de consumo que el urbano, industrial o semi-urbano; 4) en ambos sexos la actividad laboral agrícola (sobre todo la no asalariada) se asocia a los niveles más altos de consumo de alcohol. en las mujeres además dicha asociación se da con la actividad laboral manual poco cualificada; 5) la clase social mantiene una relación inversa con el consumo de alcohol. Finalmente las clases sociales «media-media» y «baja» presentan las mayores cifras de «ingesta excesiva de alcohol»