Los ácidos grasos poliinsaturados de cadena larga (ÁGPICL) son claves en el neurodesarrollo embrionario, fetal y durante la infancia. Además, son esenciales para el ser humano, lo que significa que no se pueden sintetizar y han de ser ingeridos en la dieta. Durante el embarazo, se adquieren de forma directa a partir de los alimentos consumidos por la madre y en la infancia a través de la leche materna y de complementos nutricionales. Las conclusiones obtenidas sugieren que la toma de estos suplementos sería solamente útil para el neurodesarrollo del bebé en aquellas mujeres que tengan un déficit debido a factores exógenos como la dieta, o endógenos como factores genéticos para la polimerización ÁGPICL; así como en prematuros, no viéndose efectos aparentes en mujeres que poseen niveles normales de ÁGPICL ni en bebés nacidos a término