Blastocystis spp. es un protozoo anaerobio que presenta una distribución mundial. Es considerado como uno de los parásitos eucariotas que más frecuentemente se encuentra en las muestras de heces humanas, pero no ha sido sino hasta las últimas décadas que se ha demostrado que Blastocystis es un protozoo, aunque tan solo en los últimos años es cuando se empieza a conocer de manera más detallada la biología de este microorganismo. Se describe que presenta frecuencias más altas en países en vías de desarrollo, probablemente esto indica que la transmisión está asociada con la falta de higiene, la exposición de los animales y el consumo de alimentos o agua contaminados. Existe una considerable controversia sobre si se trata de un organismo comensal o de un verdadero patógeno por lo que se ha planteado determinar si existe relación entre la cuantificación de Blastocystis spp. (> 5 parásitos /campo o < 5 parásitos /campo) con la sintomatología que produce, con las posibles vías de transmisión y si dicho criterio tiene aplicación clínica real. Con este fin, se realizó, partiendo de revisión de historias clínicas médicas, un estudio de tipo transversal en el que se seleccionaron, mediante la prueba de Chi-cuadrado, las variables que podían constituir los modelos de regresión logística que ayudasen a responder a los objetivos planteados. Los resultados mostraron una relación significativa con un número mayor de 5 Blastocystis spp. por campo con la edad de los pacientes, el presentar dolor de tórax como síntoma clínico, el haber acudido a una visita médica, el presentar diabetes mellitus tipo 2 como comorbilidad asociada y el número días de tratamiento. Las tasas de infección de este parásito fueron más altas en las zonas de Ejea de los Caballeros, Tarazona y el Barrio Oliver en Zaragoza capital. No se encontraron diferencias significativas entre la distancia con el tiempo en que se tomaron las muestras de heces y la cuantificación por campo. Este trabajo, pone de manifiesto la importancia de una educación higiénica adecuada, que proteja a la población, en la medida de lo posible, de los riesgos asociados a dicha parasitación y , además de la necesidad de estudios futuros que permitan determinar el papel que juega Blastocytis spp. en las patologías digestivas.<br /