La República Argentina fue durante nueve años 1er. exportador mundial de miel y mantiene el 3er. lugar como productor, razón por la cual el SENASA, desde el año 2000 ha endurecido la normativa vinculada con la producción y comercialización de los productos Apícolas. Esto dejó muchos productores fuera de los canales legales de comercialización. Para contrarrestar esta situación los productores Apícolas de Mendoza, reunidos en el CAAM, propusieron el proyecto “construcción de salas de extracción comunitarias”. Una de estas salas se instaló en la localidad de La Consulta. Esta planta comunitaria es utilizada por un pequeño número de productores Apícolas. El resto sigue extrayendo en su casa en forma muy precaria, con grandes riesgos de contaminación microbiológica de la miel y problemas de comercialización por ausencia de trazabilidad. Los productores no visualizan la importancia de extractar en un local habilitado. El diagnostico nos lleva a concluir que son dos los motivos más importantes: falta de planificación y ausencia de una metodología clara de trabajo. La modalidad utilizada en la operación de la plantas es que los productores se alternen para operarla y esto hace difícil la coordinación e instrumentación de Buenas Prácticas de Manufactura. La actividad de extensión consiste en acompañar a los Apicultores en todas las etapas del proceso de extracción de la miel. Los integrantes del equipo de extensión trabajaron junto a los Apicultores en la extracción de los panales, desabejado y transporte. En la sala comunitaria en el desoperculado, extracción y almacenamiento. En gabinete, redactaron la Rutina de Extracción y se puso a consideración de los productores en un plenario; se acordaron algunos puntos y otros se re estudian para ser presentados en otras reuniones plenarias. Luego de la segunda campaña los apicultores participantes ensayarán la rutina elaborada en forma conjunta, y se espera que esto despierte el interés de los demás por participar. La rutina busca economizar el tiempo total empleado de trabajo por kilo de miel extractada, mejorar la coordinación, mejorar el aspecto del establecimiento en cuanto al orden en todas las zonas en las que está sectorizada la planta; perfeccionar la comercialización por mejor identificación del origen de las mieles y su presentación en el tambor. Se espera un incremento en el número de apicultores que extraen la miel en la sala comunitaria. En esta primera experiencia se extrajeron 15000 kgs de miel de 10 productores