Trichomonas vaginalis: la versatilidad de un parásito tenaz

Abstract

Trichomonosis is one of the most prevalent nonviral sexually transmitted infection (S.T.I.) worldwide, with an estimated 276 million cases per year according to WHO overview. Little attention is paid to this disease, although more than 50% of S.T.I. curable are caused by this protozoon. Clinically, Trichomonas vaginalis infection can produce a wide range of pathological manifestations, from asymptomatic presentation to severe inflammatory and invasive lesions in the genitourinary tract of both men and women. The possible role displayed by T. vaginalis as a viral vector might also explain its role as a risk factor in the development of cervical and prostate neoplasia. In addition, trichomonosis is strongly associated with transmission and acquisition of other bacterial and viral pathogens like HIV. T. vaginalis is a very complex organism and has developed diverse mechanisms for the colonization of the genitourinary tract probably due to its extensive genome. This parasite must survive in a hostile environment exposed to continue fluctuations. Surprisingly, T. vaginalis possesses one of the largest and most repetitive genomes, with a core set of 60,000 protein-coding genes. According to all these features, T. vaginalis could be considered an excellent model of parasite to be studied in order to better understand the dynamics and immune evasion mechanisms of such versatile parasite.La tricomonosis urogenital humana, causada por el parásito Trichomonas vaginalis, es una de las infecciones de transmisión sexual (I.T.S.) de mayor prevalencia en el mundo, con un total de 276 millones de casos cada año, según la OMS.Algunos autores la han calificado como una enfermedad desatendida u olvidada ligada a la pobreza, a pesar de que más del 50% de las I.T.S. curables se deben a este agente etiológico. La tricomonosis cursa con un rango amplio de manifestaciones clínicas, que van desde casos asintomáticos hasta cuadros más graves e invasivos de los conductos genitourinarios. Se ha relacionado la infección con el riesgo de adquisición y transmisión del VIH y de lesiones preneoplásicas de cérvix y próstata. Este protozoo parásito presenta una gran variabilidad intraespecífica en su comportamiento patogénico, probablemente por el tamaño y complejidad de su genoma, con más de 60.000 genes codificantes. Es capaz de sobrevivir y colonizar un nicho complejo sometido a constantes fluctuaciones, el aparato genitourinario, pasando desapercibido en muchos casos. El tamaño y complejidad de su genoma convierten a T. vaginalis en un parásito de gran interés científico para el estudio de los mecanismos de patogenia y evasión de la respuesta inmune

    Similar works