Theology, News and Notes - Vol. 51, No. 01

Theology News & Notes was a theological journal published by Fuller Theological Seminary from 1954 through 2014.https://digitalcommons.fuller.edu/tnn/1149/thumbnail.jp

Estado nutricional en niños del tercer nivel de los preescolares: El Jardín de Infancia Rubén Darío y Escuela Rubén Darío de la ciudad de León

DOI: http://dx.doi.org/10.5377/universitas.v2i2.1647Un buen estado nutricional ayuda al buen desarrollo físico e intelectual y contribuye a asegurar una vida larga y saludable. Identificando el estado nutricional de una comunidad y sus factores permite evaluar los programas de salud para poder hacer cambios necesarios. El propósito de este trabajo es evaluar el estado nutricional y los factores socioeconómicos niños del tercer nivel de los preescolares el Jardín de Infancia Rubén Darío y Escuela Rubén Darío de la ciudad de León. Se realizó medidas antropométricas en los niños de la población antemencionada y se determinó su clasificación nutricional utilizando puntaje Z. También se administró una encuesta a los padres de los niños para recopilar datos socioeconómicos. Utilizando los parámetros de P/T se encontró que 16.8% de los niños tenían una desnutrición leve, 5% una desnutrición moderada y 1 niño presentaba desnutrición severa. Se encontró 55.4% presentaban una nutrición normal, 13% obesidad y 8% de los niños en sobrepeso. Los niños de la Escuela Rubén Darío eran más propensos a presentar desnutrición mientras que los niños del Jardín de Infancia eran más propensos a presentar sobrepeso u obesidad. Entre los factores socioeconómicos más influyentes se encontró el ingreso económico de la familia, nivel educativo de los padres y el hábito de comer entre comidas.DOI: http://dx.doi.org/10.5377/universitas.v2i2.164

Estado nutricional en niños del tercer nivel de los preescolares: El Jardín de Infancia Rubén Darío y Escuela Rubén Darío de la ciudad de León

Un buen estado nutricional ayuda al buen desarrollo físico e intelectual y contribuye a asegurar una vida larga y saludable. Identificando el estado nutricional de una comunidad y sus factores permite evaluar los programas de salud para poder hacer cambios necesarios. El propósito de este trabajo es evaluar el estado nutricional y los factores socioeconómicos niños del tercer nivel de los preescolares el Jardín de Infancia Rubén Darío y Escuela Rubén Darío de la ciudad de León. Se realizó medidas antropométricas en los niños de la población antemencionada y se determinó su clasificación nutricional utilizando puntaje Z. También se administró una encuesta a los padres de los niños para recopilar datos socioeconómicos. Utilizando los parámetros de P/T se encontró que 16.8% de los niños tenían una desnutrición leve, 5% una desnutrición moderada y 1 niño presentaba desnutrición severa. Se encontró 55.4% presentaban una nutrición normal, 13% obesidad y 8% de los niños en sobrepeso. Los niños de la Escuela Rubén Darío eran más propensos a presentar desnutrición mientras que los niños del Jardín de Infancia eran más propensos a presentar sobrepeso u obesidad. Entre los factores socioeconómicos más influyentes se encontró el ingreso económico de la familia, nivel educativo de los padres y el hábito de comer entre comidas

Ocular metastasis of colorectal cancer: An uncommon presentation of a common malignancy

AbstractApproximately 20% of patients with colorectal cancer have metastatic disease at time of diagnosis, and another 25–35% develop metastases during the course of their disease. Liver, peritoneum, and lungs are the most common sites of metastases. We report the case of a 60-year-old female who presented with ocular metastasis 4years after her initial curative-intent treatment for T3N1M0 rectal adenocarcinoma. After local eye radiation therapy, she received palliative systemic chemotherapy and enjoyed a good quality of life for 32months before succumbing to progressive disease. Ocular metastasis of colorectal cancer is rare. When present, it usually occurs in the setting of diffuse hematogenous spread. In addition to local therapy, systemic chemotherapy should also be considered

Phase I Study of Lenalidomide and Sorafenib in Patients With Advanced Hepatocellular Carcinoma

LESSONS LEARNED: Combination therapies in patients with hepatocellular carcinoma can be associated with overlapping toxicity and are therefore poorly tolerated.Using sorafenib at the maximum tolerated dose can lead to a higher incidence of toxicities. Consequently, combination studies might evaluate sorafenib at alternative schedules or doses to improve tolerance, recognizing this could affect sorafenib efficacy.Although this combination was poorly tolerated, it does not exclude further evaluation of new-generation immunomodulator drugs or immune checkpoint inhibitors in the hope of optimizing tolerance and safety. BACKGROUND: Sorafenib is the standard treatment for advanced hepatocellular carcinoma (HCC), and to date, no combination therapy has demonstrated superior survival compared with sorafenib alone. The immunosuppressive microenvironment in HCC is a negative predictor for survival. Lenalidomide is an immunomodulator and antiangiogenic agent, with limited single-agent efficacy in HCC. Based on these data, we designed a phase I study of sorafenib plus lenalidomide to determine the safety and preliminary antitumor activity of this combination. METHODS: This was an open-label, phase I study with a 3+3 dose escalation/de-escalation design. The starting dose of sorafenib was 400 mg p.o. b.i.d. and of lenalidomide was 15 mg p.o. daily with a planned dose escalation by 5 mg per cohort up to 25 mg daily. Dose de-escalation was planned to a sorafenib dose of 400 mg p.o. daily combined with two doses of lenalidomide: 10 mg p.o. daily for a 28-day cycle (cohort 1) and 10 mg p.o. daily for a 21- or 28-day cycle (cohort 2). Patients with cirrhosis, a Child-Pugh score of A-B7, and no previous systemic therapy were eligible. RESULTS: Five patients were enrolled. Their median age was 56 years (range 39-61), and the ECOG status was 0-2. Four patients were treated at dose level (DL) 1. Because of the poor tolerance to the combination associated with grade 2 toxicities, one more patient was treated at DL -1. No dose-limiting toxicity was observed as specified per protocol. The most common toxicities were nausea, anorexia, pruritus, elevated liver enzymes, and elevated bilirubin. Three patients experienced one or more of the following grade 3 toxicities: fatigue (DL 1), increased bilirubin (DL 1), skin desquamation (DL -1), and elevated transaminase levels (DL 1). The median duration of therapy was 1 cycle (range 1-3). All patients discontinued the study, 4 because of progressive disease and 1 by patient preference. The best confirmed response was progressive disease. The median progression-free survival was 1.0 month (95% confidence interval 0.9-2.8), and the median overall survival was 5.9 months (95% confidence interval 3.68-23.4). CONCLUSION: In our small study, the combination of lenalidomide and sorafenib was poorly tolerated and showed no clinical activity. Although the study was closed early because of toxicity concerns, future studies assessing combinations of sorafenib with new-generation immunomodulator drugs or other immunomodulatory agents, should consider lower starting doses of sorafenib to avoid excessive toxicity